Lejanía
LEJANIA
Estáis a miles de kilómetros. Muy
lejos, en un país desconocido, conociendo una cultura muy distinta,
descubriendo otras formas de vivir, a otras personas, algunas de vuestra edad y
también de otras.
Os fotografiáis con unas sonrientes
mujeres vestidas con unos maravillosos saris coloridos. Visitáis unos
antiquísimos monumentos, bellísimos.
Probáis un sinfín de comidas
diferentes. Descansáis en buenos hoteles, compráis suvenires de toda clase.
Me encanta saber que estos viajes
os ayudan a crecer conociendo el mundo, conociendo las diferentes formas de
vivir que hay en él. Tenéis muchísima suerte de poder hacerlo.
Espero y deseo que estos años que
lleváis viajando y todos los sitios en los que habéis estado, os sirvan para
ser mejores personas, más cultas y sobretodo os proporcionen tolerancia para
con los demás.
Os imagino desde la distancia,
desde la paz de mi hogar, visitando esas tierras lejanas como unas intrépidas
viajeras que fotografían paisajes, gentes y que guardan en su mente, imágenes
para siempre.
Desde esa paz de mi pequeño hogar,
os quiero, os adoro y os pienso constantemente. No me está permitido aprender
junto a vosotras en esta etapa de la vida. Ahora no es mi momento. Lo fue, en
el pasado y lo fue durante bastantes años.
Aprendimos las tres juntas a
descubrir el mundo desde los ojos de unas preciosas niñas pequeñas. Aprendimos
lo que es la buena convivencia, aprendimos a crecer, aprendimos juntas a
estudiar, a jugar y aprendimos muchos valores.
También aprendimos a tener complicidad
entre nosotras, aprendimos a respetarnos y a cuidarnos.
Ahora con todas esas enseñanzas ya
no estamos juntas, ahora es otra persona quién os ayuda a aprender y estoy
feliz porque esa persona sea vuestro padre.
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